Introducción al ramen

Bol de ramen de miso
Bol de ramen de miso

En Asiahop hemos preparado esta introducción al ramen (ラーメン) para que conozcas lo más importante antes de viajar a Japón y puedas disfrutar al máximo de tus experiencias culinarias. Aquí encontrarás un recorrido visual por los mejores tipos de ramen de Japón, acompañado de fotografías.

También compartimos la fascinante historia del ramen, sus ingredientes tradicionales y las regiones niponas con las variedades más populares de este icónico plato. Con este artículo aprenderás a apreciar el ramen en toda su complejidad, reconocer sus componentes y descubrir la rica cultura que se ha desarrollado alrededor de esta delicia gastronómica durante más de un siglo.

En este artículo sobre el ramen encontrarás:

Algo más que una sopa con fideos

Si pensamos en la gastronomía japonesa, el ramen se ha convertido en uno de sus embajadores más reconocidos a nivel mundial. Sin embargo, detrás de este aparentemente sencillo tazón de fideos y caldo, se esconde una historia rica, una técnica depurada y una diversidad que sorprende.

El ramen tiene sus raíces en la cocina china, llegando a Japón a finales del siglo XIX cuando el país nipón comenzaba a abrirse al mundo tras siglos de aislamiento. Un hito importante fue la apertura del restaurante Rairaiken en 1910 en el barrio de Asakusa, Tokio, considerado el primer establecimiento de ramen documentado en Japón. En estos primeros años, los fideos tipo «lamian» (拉麺) chinos fueron adaptándose gradualmente al gusto japonés, transformándose en lo que hoy conocemos como ramen.

La etimología de la palabra «ramen» refleja esta evolución: inicialmente conocido como «shina soba» (支那そば) o «chuka soba» (中華そば), ambos términos que significan «fideos chinos», el plato fue rebautizado con el tiempo. El término actual «ramen» deriva de la pronunciación japonesa del término chino «lamian», que literalmente significa «fideos estirados».

Fue durante el período Showa (1926-1989), y especialmente después de la Segunda Guerra Mundial, cuando el ramen experimentó su gran auge en Japón. La escasez de arroz llevó a buscar alternativas alimenticias, y el trigo importado principalmente de Estados Unidos permitió que los fideos se popularizaran. Para los japoneses que enfrentaban tiempos difíciles, un tazón caliente de ramen representaba no solo un lujo asequible sino un símbolo de la recuperación económica del país.

Con el tiempo, el ramen pasó de ser un plato extranjero a convertirse en un emblema de la adaptabilidad culinaria japonesa. Cada región comenzó a desarrollar su propio estilo, incorporando ingredientes locales y técnicas propias, creando así una identidad gastronómica híbrida que es profundamente japonesa en su filosofía, aunque china en sus orígenes. Esta transformación representa perfectamente el concepto japonés de «wakon yosai» (和魂洋才) – espíritu japonés, conocimientos occidentales – aplicado a la gastronomía.

Los Cuatro Pilares del Ramen

El ramen no es simplemente una sopa con fideos; es un equilibrio meticuloso de cuatro elementos fundamentales que, combinados, crean una sinfonía de sabores y texturas.

El caldo (スープ, sūpu)

El alma del ramen es indudablemente su caldo. La preparación de un buen caldo puede llevar desde varias horas hasta días enteros de cocción lenta, extrayendo sabores profundos de huesos, carnes, mariscos y vegetales. En los restaurantes más tradicionales, los caldos pueden cocinarse durante más de 12 horas, manteniendo un control preciso de la temperatura para extraer el máximo sabor sin generar amargor.

Los maestros del ramen distinguen entre dos categorías principales de caldo:

  • Chintan (清湯): Caldos claros y transparentes, elaborados a fuego medio-bajo para no enturbiar el líquido.
  • Paitan (白湯): Caldos turbios y cremosos, preparados a fuego alto con constante agitación para emulsionar las grasas y colágenos.
Bol de ramen de miso
Bol de ramen de miso

Existen cuatro estilos principales de caldo:

  • Tonkotsu (豚骨): Originario de Kyushu, se elabora hirviendo huesos de cerdo durante horas a fuego alto hasta conseguir un caldo tipo paitan cremoso, turbio y extremadamente rico. Su color blanquecino y su textura untuosa son inconfundibles. La temperatura ideal de cocción oscila entre 96-98°C para maximizar la extracción de colágeno sin llegar a enturbiar demasiado el caldo.
  • Shio (塩, «sal»): Es el estilo más ligero y claro, típicamente un ramen tipo chintan. Basado en un caldo de pollo y a veces mariscos como niboshi (煮干し), pequeñas anchoas secas, katsuobushi (鰹節), que son virutas de bonito seco y alga kombu (昆布), sazonado principalmente con sal. Resulta transparente y refrescante, permitiendo apreciar sutilezas de sabor.
  • Shoyu (醤油, «salsa de soja»): Un caldo a base de pollo y vegetales, sazonado con salsa de soja, que le confiere un color ámbar característico. Es equilibrado, con un perfil umami bien definido y representa el estilo clásico de Tokio. Los restaurantes de ramen de mayor prestigio suelen elaborar sus propias mezclas personalizadas de shoyu, a menudo en colaboración con fabricantes tradicionales de salsa de soja.
  • Miso (味噌): El más reciente de las cuatro variedades, originario de Hokkaido en la década de 1950. Utiliza pasta de miso fermentada para crear un caldo robusto y reconfortante, ideal para los duros inviernos del norte de Japón. Existen variantes que combinan diferentes tipos de miso (rojo, blanco, amarillo) para lograr un perfil de sabor único.

Además, los chefs contemporáneos están explorando bases alternativas como caldos vegetarianos potenciados con hongos y fermentos, o caldos de aves como pato o faisán para crear experiencias gourmet.

Los fideos (麺, men)

El segundo ingrediente estrella del ramen son los fideos. Cuya textura, grosor y forma varían según el estilo de ramen. Elaborados con harina de trigo, agua, sal y kansui (水, una solución alcalina que les da su característico color amarillento y elasticidad), los fideos del ramen son una ciencia en sí mismos.

Fideos de ramen sin cocinar
Fideos de ramen sin cocinar

El proceso de elaboración tradicional comienza con el amasado, seguido de un período de reposo de la masa que puede variar entre 1 y 24 horas dependiendo de la receta. Este reposo permite que el gluten se desarrolle adecuadamente, otorgando a los fideos la textura elástica característica. El porcentaje de hidratación varía significativamente: desde un 32% para fideos muy firmes hasta un 40% para variedades más suaves.

Los fideos se cortan en diferentes espesores mediante máquinas especializadas, algunas de las cuales son reliquias con décadas de antigüedad, cuyos rodillos gastados imprimen un carácter único a los fideos. Los maestros artesanos pueden distinguir variaciones de grosor de décimas de milímetro.

Los fideos delgados y rectos (細麺) llamados » hosomen» suelen acompañar caldos ligeros como el shio o shoyu, permitiendo una absorción rápida del sabor. Por otra parte, los fideos gruesos y ondulados (太麺) llamados «futomen» se emparejan habitualmente con caldos más contundentes como el tonkotsu o el miso, ya que su textura y forma retienen mejor estos caldos espesos.

En los mejores ramen-ya (拉麵屋), así se llaman los restaurantes de ramen, los fideos se cocinan con precisión milimétrica para conseguir ese punto perfecto. Los clientes pueden especificar la consistencia deseada utilizando términos como «katame» (固め, firmes), «futsuu» (普通, normales), o «yawarakame» (柔らかめ, blandos). El tiempo de cocción óptimo suele oscilar entre 40 segundos y 2 minutos, dependiendo del grosor.

El tare (タレ)

El tare es un concentrado de sabor y es probablemente el componente del plato menos visible pero más definitorio del carácter de un buen ramen. El tare es una salsa concentrada que se coloca en el fondo del tazón antes de verter el caldo, y determina si estamos ante un ramen tipo shoyu, shio, miso o cualquier otra variante. Le aporta profundidad de sabor y distinción.

Bol de ramen con salsa tare en el fondo
Salsa tare japonesa para el ramen

Los maestros del ramen guardan celosamente las recetas de sus tares, que suelen incluir combinaciones secretas de salsa de soja añejada, mirin (味醂, vino de arroz dulce), sake, especias, hongos secos y otros potenciadores del umami. Algunos establecimientos históricos utilizan bases de tare que se han mantenido en constante evolución durante décadas, algo conocido como «tane-dare» (種タレ) o «tare semilla», al que se añaden nuevos ingredientes periódicamente manteniendo una parte del original.

La proporción entre tare y caldo es crucial: generalmente oscila entre 1:10 y 1:13, dependiendo de la intensidad buscada. Un error en esta proporción puede arruinar el equilibrio de todo el plato.

Variantes regionales y especiales incluyen:

  • Yuzu-shio tare: Con cítricos yuzu para un sabor refrescante.
  • Kara-miso: Tare de miso picante con toban-jan (pasta de judías picante).
  • Mayu: Aceite de ajo negro carbonizado que añade profundidad ahumada.

Este componente es tan definitorio que dos ramen pueden utilizar exactamente el mismo caldo pero resultar completamente diferentes debido al tare empleado.

Los complementos del ramen (トッピング, toppingu)

El arte final del plato lo aporta la selección de complementos, cuidadosamente seleccionados para armonizar con el resto de ingredientes del ramen. Entre los más habituales encontramos:

  • Chashu (チャーシュー): Finas lonchas de cerdo (generalmente panceta o lomo) cocido lentamente durante 3-4 horas a baja temperatura (aproximadamente 65-70°C) en una mezcla de salsa de soja, sake, mirin, azúcar y otros condimentos hasta alcanzar una textura tierna que se deshace en la boca. Los mejores chashu mantienen un equilibrio entre las partes magras y las grasas, que deben estar perfectamente derretidas.
  • Ajitama (味玉): Un huevo cocido con la yema semicurada, marinado entre 4-6 horas en una mezcla de salsa de soja y mirin. La técnica perfecta busca una clara firme y una yema cremosa que sea sólida en el borde pero mantenga el centro fluido.
  • Negi (ネギ): Cebollino verde japonés, añadido tanto por su frescura aromática como por su contraste visual. Puede servirse finamente picado, en rodajas diagonales o en juliana, dependiendo del estilo.
  • Nori (海苔): Alga marina tostada que aporta un intenso sabor a mar. Tradicionalmente se coloca parcialmente sumergida en el caldo, permitiendo que se ablande gradualmente.
  • Menma (メンマ): Brotes de bambú fermentados que aportan una textura crujiente y un aroma distintivo. Se marinan previamente en una mezcla de condimentos dulce-salada.
Bol de niku soba en Tokio, fideos de trigo sarraceno con ternera, huevo, cebollino y algas.
Bol de «niku soba ramen» en estación de tren de Sasazuka, Tokio.

Otros complementos menos comunes son:

  • Butter corn (バターコーン): Maíz dulce y mantequilla, especialmente en Hokkaido.
  • Wakame (わかめ): Alga verde fresca habitual en zonas costeras.
  • Benishoga (紅しょうが): Jengibre encurtido rojo que añade color y acidez.
  • Naruto (なると): Pasta de pescado en espiral blanca y rosada, tradicional en el shoyu ramen.

Los aceites aromáticos también juegan un papel crucial: aceite de ajo (にんにく油, ninniku abura), aceite de chile (ラー油, rayu) o aceite de cebollino añaden una dimensión extra y ayudan a «sellar» el calor del caldo.

En definitiva cada ramen-ya elabora una combinación única de ingredientes y proporciones que le da identidad a sus platos de ramen.

Top de ramen más populares

La diversidad del ramen en Japón es asombrosa, con cada región desarrollando su propio estilo distintivo, adaptado al clima local, los ingredientes disponibles y las preferencias culturales de sus ciudadanos.

En tu viaje a Japón te invitamos que explores la amplia variedad de versiones del ramen. Debido a la popularidad, muchas versiones regionales del ramen están disponible a lo largo de todo Japón, especialmente en las grandes ciudades donde puedes degustar lo mejor de todo el país.

Aquí te dejamos algunos de los considerados como mejores ramen de Japón:

Ramen de Hokkaido (北海道ラーメン)

En la isla más septentrional de Japón, donde los inviernos ven temperaturas bajo cero, el ramen ha evolucionado hacia variantes contundentes y reconfortantes. El miso ramen de Sapporo (札幌) es el más emblemático: un caldo potente a base de miso, generalmente acompañado de mantequilla, maíz dulce y a veces una porción de carne picada salteada.

Bol de ramen de Hokkaido con cerdo y maíz
Bol de ramen de Hokkaido con cerdo y maíz

Este estilo tiene un origen bien documentado: nació en 1955 en el restaurante «Aji no Sanpei» (味の三平), cuando su propietario Morito Omori creó esta receta inspirado en platos chinos y adaptándola al frío clima local. La grasa de la mantequilla, las calorías del miso y los carbohidratos de los fideos gruesos proporcionan la energía necesaria para sobrellevar las bajas temperaturas.

Los viajeros a Sapporo deberían visitar el famoso «Ramen Yokocho» (ラーメン横丁), un callejón con una concentración de pequeños establecimientos de ramen tradicionales, muchos operando desde los años 50, ubicado en el distrito de Susukino.

Otras variantes importante de Hokkaido incluyen:

  • El Asahikawa Ramen (旭川ラーメン): Caracterizado por su caldo shoyu con una fina capa de aceite en la superficie que ayuda a mantener el calor, crucial en esta ciudad que registra algunas de las temperaturas más bajas de Japón.
  • El Hakodate Ramen (函館ラーメン): Un caldo transparente de pollo y mariscos con sal, reflejando la tradición pesquera de este puerto sureño de Hokkaido.

Ramen de Tokio (東京ラーメン)

El shoyu ramen es el emblema de la capital japonesa. Caracterizado por un caldo chintan transparente pero sabroso a base de pollo y dashi (出汁, caldo de pescado y algas), sazonado con una salsa de soja especialmente seleccionada. Los fideos suelen ser finos y rectos, mientras que los complementos son clásicos: chashu, naruto, ajitama y espinacas u otras verduras escaldadas.

Set de ramen tipo Shoyu en restaurante Afuri, Tokio
Set de ramen tipo Shoyu en restaurante Afuri, Tokio

Cada barrio de Tokio tiene su propia tradición ramenera:

  • Ogikubo: Conocido por su ramen de caldo de pollo ligero con shoyu.
  • Ikebukuro: Famoso por su tonkotsu-gyokai, que combina cerdo y mariscos.
  • Nakano: Célebre por establecimientos antiguos con recetas preservadas durante generaciones.

Los viajeros gastronómicos no deberían perderse el «Tokyo Ramen Street» en la estación de Tokio, una concentración de sucursales de las ramen-ya más famosas del país, como Rokurinsha (六厘舎), conocida por su excepcional tsukemen, o el histórico Harukiya (春木屋) en Ogikubo, operando desde 1949 con su caldo especial envejecido.

En los últimos años ha surgido un «nuevo estilo de Tokio», más refinado y ligero, ejemplificado por establecimientos como Afuri, que utiliza yuzu (柚子), un cítrico muy apreciado, para dar frescura a sus caldos.

Ramen de Hakata (博多ラーメン)

Originario de Fukuoka, en la isla de Kyushu, el ramen de Hakata es sinónimo de tonkotsu (豚骨) o huesos de cerdo. Su caldo extremadamente espeso y turbio, producto de hervir huesos de cerdo a fuego alto durante muchísimas horas. Esto crea una textura casi cremosa que pone a prueba la noción occidental del concepto de sopa.

Bol de ramen Hakata, típico de Fukuoka
Bol de ramen Hakata, típico de Fukuoka

Sus fideos son característicamente muy finos y se sirven al dente. Una peculiaridad de los establecimientos de Hakata es el «kaedama» (替え玉), sistema por el cual los comensales pueden pedir una ración extra de fideos para añadir al caldo sobrante. Este sistema surgió por la preferencia local por fideos muy firmes, que se ablandan rápidamente, requiriendo reemplazo para mantener la textura óptima.

Una característica única de Fukuoka es la tradición de los «yatai» (屋台), puestos callejeros de ramen que se instalan al anochecer, creando una experiencia gastronómica auténtica y social. El distrito de Nakasu concentra muchos de estos puestos tradicionales.

El restaurante «Ganso Nagahama Ramen» es considerado el establecimiento original que creó este estilo de ramen allá por 1952, que luego evolucionó hacia la receta actual de Hakata.

Los visitantes también pueden disfrutar del «Hakata Ramen Stadium» en Canal City, un espacio gastronómico con diferentes estilos regionales de ramen en un solo lugar.

Ramen de Sapporo (札幌ラーメン)

Aunque ya mencionado dentro de los estilos de Hokkaido, el ramen de Sapporo merece atención especial.

El Sapporo Ramen tiene una historia relativamente reciente y bien documentada. A diferencia de otros estilos con orígenes difusos, sabemos exactamente cuándo y dónde nació: en 1955, en el restaurante «Aji no Sanpei» (味の三平), ubicado en el distrito de Susukino.

Ramen de miso de Sapporo en Hokkaido, Japón
Ramen de miso de Sapporo en Hokkaido, Japón

Su creador, Morito Omori (大森盛夫), experimentaba para encontrar un plato que combatiera el crudo invierno de Hokkaido. Inspirado por la cocina china, particularmente la de la región de Manchuria, y las técnicas japonesas de elaboración de fideos, Omori creó un ramen con base de miso, algo revolucionario para la época cuando los estilos shoyu (salsa de soja) y shio (sal) dominaban el panorama.

La innovación no fue casual: el miso, alimento fermentado tradicional japonés y rico en proteínas, proporciona un sabor intenso y mayor densidad calórica, ideal para un clima donde el cuerpo necesita más energía para mantenerse caliente. La adición de mantequilla, algo inusual en la gastronomía japonesa tradicional, reflejaba la creciente industria láctea de Hokkaido, que había comenzado durante la era Meiji como parte de los esfuerzos modernizadores.

Para la década de 1960, el miso ramen se había convertido en la identidad culinaria de Sapporo, y en los 70s alcanzó reconocimiento nacional cuando los establecimientos de Sapporo comenzaron a expandirse a Tokio y otras grandes ciudades.

Su característica definida es el uso de miso rojo como base del tare, creando un sabor robusto y terroso. Lo que lo hace único es la adición de mantequilla, que se derrite en el caldo caliente, aportando cremosidad y riqueza.

Este ramen suele incluir verduras salteadas, como cebolla, zanahoria, y repollo, además del omnipresente maíz, cultivado en abundancia en las llanuras de Hokkaido. La combinación de mantequilla y maíz dulce puede recordar a influencias occidentales, pero integradas perfectamente en la tradición japonesa.

El epicentro de la cultura del ramen en Sapporo es el famoso «Ramen Yokocho» (ラーメン横丁), un callejón histórico en el distrito de entretenimiento de Susukino que alberga 17 pequeños establecimientos de ramen, cada uno con su propia interpretación del estilo clásico. Establecido en 1951 originalmente como un mercado negro de postguerra, evolucionó hasta convertirse en un destino gastronómico icónico.

En estos diminutos locales, a menudo con capacidad para no más de 10 clientes, los comensales se sientan en la barra frente al chef, observando la preparación de cada tazón. La atmósfera es cálida no solo por el vapor de los caldos, sino por la proximidad entre clientes y cocineros que intercambian comentarios sobre el clima gélido exterior mientras disfrutan del calor reconfortante del ramen.

Kitakata Ramen (喜多方ラーメン)

El Kitakata Ramen (喜多方ラーメン) representa uno de los «Tres Grandes Ramen» de Japón, junto con el Sapporo Miso Ramen y el Hakata Tonkotsu Ramen. Originario de la pequeña ciudad de Kitakata, en la prefectura de Fukushima, esta variedad ha conquistado corazones y paladares por su singular combinación de simplicidad y profundidad.

Bol de ramen al estilo Kitakata con abundante cerdo
Bol de ramen al estilo Kitakata con abundante cerdo

La historia del Kitakata Ramen se remonta a principios de la era Showa (década de 1920-1930), cuando comerciantes que regresaban de Manchuria trajeron técnicas culinarias chinas a esta región montañosa. Kitakata era tradicionalmente un centro de producción de sake y shoyu (salsa de soja), gracias a su agua de alta calidad y a su clima adecuado para fermentaciones. Estos factores resultaron fundamentales para el desarrollo de su estilo único de ramen.

El primer establecimiento de Kitakata Ramen fue Genraiken (元来軒), fundado por Bannai Shokudo en 1926, y que continúa operando actualmente, sirviendo una receta que ha mantenido su esencia por casi un siglo. Esta tienda pionera estableció las características que definirían este estilo regional.

Lo que verdaderamente distingue al Kitakata Ramen son sus fideos. A diferencia de la mayoría de estilos de ramen japonés, los fideos de Kitakata son excepcionalmente anchos y planos, ondulados y gruesos con una textura firme pero masticable para conseguir una textura específica.

Estas características se deben en parte al clima frío de la región: los fideos más gruesos retienen mejor el calor y proporcionan una mayor satisfacción. Tradicionalmente, los fideos se fabricaban a mano y se dejaban reposar durante la noche, lo que les confería una textura particular denominada «hoshi-men» (干し麺, fideos secos) que resulta en una textura única en la boca.

A diferencia de otras partes de Japón donde el ramen se consume principalmente para almuerzo o cena, en Kitakata es tradicional disfrutarlo como primera comida del día. Muchos establecimientos abren sus puertas a las 7 de la mañana para atender a trabajadores locales, principalmente agricultores y artesanos que buscan un desayuno sustancioso antes de comenzar su jornada.

Otros estilos dignos de mención

Tantanmen, un bol de ramen picante con huevo y carne picada.
Tantanmen, un bol de ramen picante con huevo y carne picada.

El mapa del ramen en Japón es prácticamente infinito, con cada ciudad pequeña orgullosa de su propia versión:

  • El tantanmen (担々麺) es la interpretación japonesa del dandan mian (担担面), un plato icónico de la provincia de Sichuan en China. El tantanmen se considera uno de los platos picantes por excelencia en el panorama gastronómico japonés. De intenso sabor, mezcla aromas y sensaciones potentes con una mezcla de aceite de chile picante, sésamo y pimienta de sichuan.
  • El Onomichi Ramen (尾道ラーメン) de Hiroshima incorpora grasa de cerdo derretida sobre el caldo, creando una película brillante en la superficie. Sus fideos planos y rectos complementan el caldo a base de mariscos y shoyu.
  • El Wakayama Ramen (和歌山ラーメン), también llamado «chuka soba» (中華そば), mantiene el nombre antiguo del ramen, con un caldo potente de soja y cerdo, y es servido junto con un cuenco de arroz cubierto con chuleta de cerdo tonkatsu.
  • El Tsukemen (つけ麺) no es estrictamente regional sino un estilo alternativo, creado en 1961 por Kazuo Yamagishi en su tienda «Taishoken». Consiste en fideos fríos que se mojan en un caldo concentrado caliente. Ha ganado enorme popularidad en las últimas décadas, especialmente en los veranos calurosos.
Set de menú de fideos de ramen tipo Tsukemen con huevos, verdura, cerdo y algas nori.
Set de menú de fideos de ramen tipo Tsukemen con huevos, verdura, cerdo y algas nori.
  • El Tokushima Ramen (徳島ラーメン) de la isla de Shikoku presenta un característico caldo marrón rojizo de cerdo y shoyu, coronado con huevo crudo o semicocido y carne picada, con opciones de dulce (甘口, amakuchi) o salado (辛口, karakuchi).
  • El Kurume Ramen (久留米ラーメン), considerado el precursor del Hakata, utiliza un caldo tonkotsu original menos procesado, con un color más oscuro y sabor más intenso.
  • El Kagoshima Ramen (鹿児島ラーメン) utiliza cerdo negro de Berkshire (黒豚, kurobuta) tanto en su caldo como en sus guarniciones, creando un sabor distintivo y lujoso.

La Experiencia Sensorial del Ramen

El ramen no es solo un plato para comer; es una experiencia multisensorial. Al entrar en un ramen-ya tradicional, lo primero que impacta es el aroma: una mezcla de caldo hirviendo, ajo frito, cebollino fresco y el umami profundo del caldo. El vapor que se eleva de los tazones crea una atmósfera casi mística.

La forma correcta de disfrutar el ramen implica un ritual: primero se aprecian los aromas, luego se prueban los fideos mientras están perfectos (muchos chefs calculan que tienen entre 5-7 minutos de textura óptima antes de ablandarse demasiado). El famoso gesto de sorber el ramen (ズルズル, zuruzuru) no es mala educación, sino una técnica que permite enfriar ligeramente los fideos ardientes mientras se potencian los sabores al mezclarlos con aire.

Bol de ramen de miso con cerdo, azafrán, huevo y cebollino por encima.
Típico bol de ramen de miso en Kioto.

Los comensales japoneses suelen comenzar probando el caldo solo, luego los fideos, y finalmente combinan ambos elementos, dejando para el final complementos como el cerdo o el huevo, auténticos premios tras la experiencia principal.

La atmósfera de un ramen-ya tradicional también forma parte de la experiencia: espacios pequeños con barras de madera, a menudo con apenas 8-10 asientos, donde los clientes pueden observar al maestro preparar cada tazón. El sonido constante de caldos hirviendo, fideos escurriéndose y el murmullo satisfecho de los clientes completa la inmersión sensorial.

El Ramen como Fenómeno Cultural

El ramen trasciende lo gastronómico para convertirse en fenómeno cultural. Películas como «Tampopo» (1985) de Juzo Itami, considerada la primera «ramen western», exploraron la filosofía detrás de este plato. El anime y manga «Naruto» popularizó internacionalmente el Ichiraku Ramen, inspirando a jóvenes de todo el mundo a descubrir el auténtico ramen.

En Japón, el «ramen otaku» es un tipo de aficionado que viaja cientos de kilómetros solo para probar un establecimiento específico. Existen revistas especializadas como «Ramen Walker» y aplicaciones como «Ramendb» donde los entusiastas comparten descubrimientos y valoraciones detalladas.

El Shin-Yokohama Raumen Museum (新横浜ラーメン博物館), abierto en 1994, fue el primer museo gastronómico temático del mundo, recreando un barrio japonés de la época Showa donde los visitantes pueden probar diferentes estilos regionales. Desde entonces, han surgido otros como el Tokyo Ramen Kokugikan Mai en Odaiba o el Fukuoka Ramen Stadium.

El ramen es ya un plato conocido internacionalemente y su popularidad se observa en el aumento de la apertura de nuevos restaurantes por todo el mundo. Sin embargo Japón sigue conservando una fineza en la elaboración y una concentración de los sabores que es difícil de encontrar en los patos de ramen en restaurantes de occidente. Tu viaje a Japón te brindará muchas experiencias gastronómicas memorables si te sumerges en el mundo del ramen.

Quieres viajar a Japón? Te damos algunas ideas:

Los lugares más originales de China y Japón


Últimas publicaciones



Planifica tu viaje

Diseñamos viajes personalizados que respetan el ritmo natural de cada viajero.


Busca en la web