
Al igual que sucede con muchas de las grandes ciudades de Asia, es muy complicado poder ver todo lo que tiene para ofrecernos una gran metrópoli en poco tiempo. Pekín, Shanghai, Tokio, Osaka… son megaurbes en las que podríamos estar un mes y no dejaría de sorprendernos con lugares nuevos que conocer. Pero la realidad es que normalmente tenemos un tiempo limitado y tenemos que optimizarlo para ver lo más destacado, pero con calma y disfrutando de la experiencia.
En Asiahop siempre proponemos planes realistas y en los que no tendrás que ir corriendo para únicamente sacarte la foto. Por eso, a continuación te planteamos un ruta sencilla pero completa para visitar alguno de los lugares más espectaculares de esta increíble ciudad que es Pekín.
Día 1. Conociendo Pekín
El primer día recomendamos dedicarlo a conocer el contexto general de la ciudad paseando por sus parques, descubriendo los hutongs y probando alguna de las delicias de la gastronomía china. Salimos de nuestro alojamiento temprano y nos dirijimos al parque Behiai (北海公园), uno de los jardines imperiales más antiguos y mejor conservados de China, ubicado en el corazón de Pekín, al noroeste de la Ciudad Prohibida.
Con más de mil años de historia, este parque combina arquitectura tradicional china y paisajes naturales. Su elemento central es el gran lago Beihai, alrededor del cual se extiende el parque, y sobre cuya isla central se alza la emblemática Dagoba Blanca, una estupa tibetana construida en honor al lamaísmo. Beihai fue en su día parte del complejo de palacios imperiales y hoy ofrece un oasis de tranquilidad en medio del bullicio urbano, ideal para pasear, navegar en el lago, y disfrutar del paisaje clásico chino entre sauces, pabellones y puentes de mármol, mientras tomamos un té en alguna de sus terrazas.

Otro parque que podemos combinar con la visita a Behiai es el parque Jingshan (景山公园), desde donde podremos obtener una vista panorámica de Pekín, especialmente de la Ciudad Prohibida que se encuentra al sur del parque.
Cerca de estos dos parques se encuentra la zona histórica de Shichahai (什刹海), un área famosa por sus por sus tres lagos conectados (Qianhai, Houhai y Xihai), sus antiguos callejones tradicionales (hutongs) y su animada vida nocturna. Antiguamente parte del sistema de agua de los palacios imperiales, hoy es un lugar perfecto para pasear junto al agua bajo los sauces y explorar callejuelas llenas de historia. Durante el día es ideal para recorridos culturales y tranquilos paseos, y por la noche se transforma en un animado punto de encuentro con música en vivo y terrazas. En invierno, los lagos se congelan y se convierten en pistas de patinaje, haciendo de Shichahai un lugar atractivo todo el año.
Día 2. Plaza de Tiananmen y Ciudad Prohibida
El segundo día tenemos dos visitas obligadas. Comenzaremos por la Plaza de Tiananmén (天安门广场) que, con una extensión de 440.000 metros cuadrados, es la plaza pública más grande del mundo y el centro simbólico y político de China. Aunque el acceso es gratuito es necesario pasar el control policial para poder acceder a la plaza, por lo que es indispensable que lleves encima tu pasaporte.
Alrededor de la Plaza de Tiananmén se encuentran algunos de los sitios más emblemáticos de la ciudad. Al sur se alza el Mausoleo de Mao Zedong, donde se puede ver el cuerpo embalsamado del líder. Al norte, la histórica Puerta de Tiananmén da acceso a la Ciudad Prohibida. A los lados de la plaza están el imponente Gran Palacio del Pueblo, sede del Parlamento chino, y el Museo Nacional de China, uno de los más grandes del mundo. En el centro de la plaza se encuentra el Monumento a los Héroes del Pueblo, dedicado a quienes lucharon por la independencia y el desarrollo del país.

Nuestro siguiente destino está justo frente a nosotros. La Ciudad Prohibida (紫禁城) es un vasto complejo palaciego situado en el corazón de Pekín, que sirvió como residencia imperial de 24 emperadores chinos durante las dinastías Ming y Qing, desde 1420 hasta 1912. Con más de 980 edificios y rodeada por altos muros y un foso, fue durante siglos un centro exclusivo del poder, al que solo podían acceder miembros de la corte y funcionarios imperiales. Hoy en día, la Ciudad Prohibida es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y funciona como el Museo del Palacio, donde los visitantes pueden explorar su arquitectura tradicional, salones ceremoniales, jardines y tesoros imperiales, que ofrecen una ventana única a la historia y cultura de la antigua China.

Día 3. Gran Muralla de China y Palacio de Verano
La Gran Muralla China, conocida en chino como Chángchéng (长城), es una asombrosa obra de ingeniería que impresiona tanto por su magnitud como por su historia. Reconocida como una de las siete maravillas del mundo moderno, se extiende a lo largo de casi 22.000 kilómetros y fue construida a lo largo de más de dos milenios. Aunque varias dinastías contribuyeron a su edificación, los tramos más famosos y mejor conservados datan de la dinastía Ming (siglos XIV al XVII). Para visitarla, existen varios tramos que se pueden recorrer fácilmente, como Badaling o Jinshanling. Sin embargo, nuestra recomendación es Mutianyu, un sector cómodo para todo tipo de visitantes, con vistas impresionantes y opciones variadas que hacen que la visita sea aún más memorable.

La visita a la Gran Muralla bien puede ser nuestra actividad del día, ya que desplazarse y acceder a ella nos llevará un par de horas. Pero si eres de los que quieres exprimir un poco más el día, puedes visitar el Palacio de Verano, aprovechando que la vuelta desde Muntianyu. Desde Asiahop podemos organizarte el día para que puedas disfrutar tranquilamente de estas dos maravillas, sin prisas y a tu ritmo.
El Palacio de Verano (颐和园) es un extenso jardín imperial situado al noroeste de Pekín, construido como lugar de descanso para la familia imperial durante los calurosos meses de verano. Con su lago Kunming, colinas, pabellones y templos, es un lugar que combina naturaleza y arquitectura en armonía. Destaca por su belleza paisajística, sus pasarelas decoradas y su historia ligada a la emperatriz Cixi, quien lo mandó restaurar en el siglo XIX.

¿Quieres viajar a Pekín y disfrutar de las maravillas históricas de esta ciudad? Contáctanos y te diseñaremos la experiencia perfecta para un viaje inolvidable.